¨¿Qué ha pasado con la cultura de los pueblos ancestrales de la América originaria y de la Amazonía en particular? Diabolizada¨ Edgar Morin [1]
¿Qué pasó con el Quipú? Satanizado y destruido física y científicamente, hoy al parecer solo se encuentra una copia en un museo alemán pero los que lo interpretaban, los que tenían los conocimientos allí plasmados fueron desaparecidos y eliminados físicamente por la cultura occidental que todavía hoy continúa en guerra contra las culturas amerindias.
Observemos con detenimiento ¿quiénes han sido durante los últimos 523 años los enemigos a perpetuidad del pensamiento y conocimiento de las culturas autóctonas ancestrales de América? , ¿quiénes han impedido el desarrollo, el crecimiento e implementación de los modelos de aprendizaje que conservaran estas culturas? , ¿quiénes satanizaron sus idiomas ancestrales negando su uso, comunicación, y su cosmovisión?, ¿quiénes desconocieron su historia? ¿quiénes impidieron que continuaran creando y valorando tecnologías que les facilitara su convivencia con el entorno natural para el bienestar y la paz? Son los miembros de la cultura capitalista occidental perversa y despiadada, del colonialismo impuesto por la ¨civilización occidental¨- si es que a esta barbaridad se le puede denominar ¨civilización¨- quienes han aparecido en el más desesperante anonimato disfrazados en forma de guerra para poder cultivar miedo y su resultado natural, la sumisión.
El nuevo colonialismo imperial llamado neoliberalismo que solo reconoce como válida la cultura occidental, como la única y universal, destruyendo el planeta como lugar habitado por múltiples culturas con múltiples posibilidades, lecturas e interpretaciones creativas que han ido cambiando por lo que pueda ser útil para el capitalismo imperial.
Son los negociantes y voceros de la Cultura de la Guerra, de la Cultura Occidental, los capitalistas, extractivistas y fascistas que controlan todo a su alrededor sin limitar sus ambiciones, sus apetitos personales y sus ansias desmesuradas de poder, de opresión, de explotación, de dominación, de engaño y de traición a su patria y a sus congéneres.
Los fascistas que están regados como ¨verdolaga en playa¨ creando divisionismo político en los sectores populares creando sectarismo a favor de intereses personalistas, lo que favorece a las élites gobernantes.
Elites que obran como invasores – como hormigas congas- que convierten a los habitantes de todo un país en fábrica de mercenarios financiados por multinacionales tales como, FMI ( Fondo Monetario Internacional), OCDE ( Organización para el Comercio y el Desarrollo Económico), que hoy invocan la OTAN para mantener las guerras capitalistas creadas por estas y otras multinacionales extractivistas y de servicios públicos en el mundo entero.
Invocados como protectores de los empresarios, de los latifundistas y de los inversionistas que tienen el poder a través de la tierra y de la guerra negando todo conocimiento y expresiones culturales que no sean útiles para el capital.
Pero todo esto que estamos viviendo hoy lo lleva tejiendo la hegemonía Conservadora en Colombia por más de 100 años, después de la guerra de los mil días se apoderaron del Ministerio de Educación, del Ministerio de Defensa y del Ministerio de Hacienda y Justicia, de pronto les dejan el Ministerio del Trabajo a los sectores populares para poder mantener vivo el fascismo y así le pusieron precio a la vida, honra y bienes de cada uno de los colombianos.
Esto empezó en la Amazonía con Rafael Reyes Prieto, quien nació el 5 de diciembre de 1849 en Santa Rosa de Viterbo y murió en Bogotá en 1921. Viajero, explorador durante su juventud se dedicó a la explotación de la quina y cuando quebró su empresa ¨quinera¨ en 1885 se hizo militar y participó más tarde del intento de la reconquista de Panamá, también fue senador, ministro, embajador, durante la presidencia de Rafael Nuñez. En 1888 se vincula a las empresas bananeras y en 1895 participó de la guerra civil en la batalla de Enciso. Durante la guerra de los mil días (1899-1902) fue embajador en París y se instaló a vivir en México.
Elegido presidente de Colombia en (1904 – 1909) con el apoyo del partido conservador, gobernó de una manera dictatorial, llamó a los indígenas salvajes incivilizados y antropófagos por lo tanto justificaba su exterminio. Su gobierno llamado ¨Quinquenio de Reyes¨, clausuró el congreso y lo reemplazó por una asamblea adepta.
Las protestas originadas por los tratados que Reyes firmó con los EEUU y Panamá impulsadas por un movimiento político opositor llamado ¨Unión Republicana¨ lo hacen renunciar encargando de la presidencia a Jorge Holguín luego huye a bordo de un buque de la ¨United Fruit¨y regresa en 1920 y muere en Bogotá en 1921.
Veamos lo que acontecía entre el período de la guerra de los mil días (1899-1902) y de la primera guerra mundial ( 1917) en el Putumayo, especialmente en la región de la Chorrera entre los ríos Caraparaná, Igaraparaná afluentes del río Putumayo y en el río Cahuanari que las vierte en el Caquetá. Esta era una región reclamada en ese momento por tres países Colombia, Perú, y el Brasil. Situación que fue aprovechada para la llegada de aventureros a nivel mundial (franceses, españoles, ingleses, judíos, italianos, brasileros, peruanos, bolivianos, colombianos, alemanes) buscando las gomas y tierras pobladas por indígenas quienes les servirían de mano de obra para poder explotar y esclavizar.
La quina se impuso a escala mundial cuando los químicos franceses Pellestier y Caventu lograron en 1820 cristalizar el alcaloide llamado ¨quinina¨ el cual se utilizó contra las fiebres palúdicas existentes en el Sur de EEUU, fiebres que también impedían la construcción del Canal de Panamá por lo tanto se vendía para EEUU y Europa. Su período de extracción se extiende desde 1850 a 1882 creándose la casa ¨Elías Reyes Hermanos¨ colocaron la bandera colombiana en los barcos que navegaban por el Río Putumayo.
La llegada de empresas extractivas iría acompañada por los misioneros quienes sometieron por una parte a los colonos a rezos durante 3 horas diarias, y a los nativos a la enseñanza doctrinal pues los consideraban seres salvajes, subhumanos, antropófagos a quienes habían que ¨civilizar¨ y adoctrinarlos.
Después de la extracción de la quina viene la extracción del caucho.
Los pueblos nativos utilizaban el caucho para recubrir las herramientas y como impermeabilizante o aislante; también lo usaban como calzado, como mascarillas para la belleza, o hacían bolas de estas gomas con las cuales jugaban. Posteriormente los ingleses para entretenerse en sus largos viajes en barco lo llamaron football siendo probable que fuera el origen de este. Aportes de los pobladores ancestrales amazónicos a la humanidad y cuyo pago fue su esclavitud y su muerte ontológica y epistemológica.
El interés de las gomas silvestres en especial el caucho o siringa comenzó después del descubrimiento del proceso de vulcanización realizado por Charles Goodyear en EEUU en el año 1839. De ahí nace la Casa Arana la que posteriormente se denominará ¨Peruvian Amazon Company¨.
Antes y durante la existencia de la Casa Arana se había establecido en esta región el negocio de las ¨hachas¨ consistente en embarcaciones de blancos que navegaban cambiando niños y niñas indígenas por hachas ¨cinco niños se cambiaban por un hacha¨. Se cambiaban por escopetas, por machetes, por serruchos. Estos niños eran llevados al Perú y se les convertía en esclavos del caucho en la selva, arrancados a sus padres luego bautizados por sacerdotes itinerantes como ¨hijos de padres desconocidos¨. Estas prácticas ocurren con mayor auge en los años 1913 a 1935.
En el año 1900 aparece un censo de los pobladores de la región de la Chorrera, mandado a realizar por Julio Cesar Arana a un geógrafo francés donde aparecen los siguientes resultados:
Huitotos: 30.000, Boras Mirañas: 18.000, Andoques: 10.000, Muinanes de la Sabana: 2.000, Okainas: 1.000, Nonuyas:1.000, Rosigeros 1.000.
En general los indígenas del predio serían alrededor de 63.000.
En este sector el pastuso Benjamín Larrañaga fundó la ¨colonia de indiana¨ donde es ubicada luego La Casa Arana Hermanos por Julio Cesar Arana, natural de Rioja San Martín. Casa que fue registrada en Londres el 27 de septiembre de 1907 para la extracción del Caucho. Con la Casa Arana se recrea un sistema económico donde se subyugaba para la posteridad y que según expresión de Paulo Freire ¨la miseria en la opulencia es la expresión de la maldad de una economía construida de acuerdo con la ética del mercado del todo vale, del sálvese quien pueda, del cada uno por su cuenta¨[2].
Para controlar, subyugar y someter a los indígenas en la extracción del caucho, la Peruvian Amazon Company (PAC) trajo afrodescendientes de Barbados y emplearon posteriormente a jóvenes adoctrinados por los sacerdotes de los diferentes pueblos indígenas para dividir, capturar, vigilar, controlar, asesinar y aterrorizar, aplicando la pedagogía del miedo a sus propios congéneres en las denominadas ¨correrías¨ llevada a cabo por los opresores jefes de secciones y los ¨muchachos de confianza¨ o ¨chorlitos¨. En este contexto creaban dentro de los dominados u oprimidos grupos fascistas con mentalidad de opresores, de dominantes que hoy se encuentran en los sectores oprimidos como líderes, defensores de la ideología de la clase dominante y trabajando para esta, perpetuando, creando, manteniendo e impulsando divisionismo.
¨El primer grupo de Barbadenses que desembarcó en el Putumayo consistía en 30 hombres y 5 mujeres y en noviembre de 1904 bajaron a la Chorrera por el rio Igara Paraná sede de la estación de ¨Arana Hnos¨. Allí fueron armados con rifles Winchester, provisiones, cartuchos y bajo el mando del colombiano Ramón Sánchez y acompañado por el Boliviano Armando Normand fueron enviados hacia los Andokes ubicados en el Igaraparana y el Yapurá ( Caquetá)¨[3]
Luego se crearon estaciones maltratadoras tales como:
Matanzas entre los Andoques, Último Retiro, Santa Catalina, La Sabana, Oriente, Abisinia, El Encanto, Occidente, Entre Ríos, Atenas, El Sur.
Además los empresarios se preocuparon por mantenerlos siempre esclavizados en la extracción del caucho sin posibilidad de que utilizaran su cultura, su lengua, sus conocimientos, su agricultura ya que no les dejaban tiempo para cultivar sus chagra, llevándolos a que se murieran de hambre y de enfermedades. Para poderlos explotar más fácilmente y poderse apropiar de su cuerpo, mental y emocionalmente, los denominaba ¨mis indios¨ y les imponían loa apellidos de los esclavistas, los marcaban negando su historia individual y colectiva como naciones amazónicas.
Las denuncias presentadas el 9 de agosto de 1907 por Benjamín Saldaña Roca sobre los asesinatos y las torturas perpetuados por la Peruvian Amazon Company (PAC) contra los indígenas fueron bloqueadas por la empresa hasta noviembre de 1910 cuando el Juez Carlos Valcárcel recibió la orden de reabrirlo y a partir de entonces, la PAC siguió obstruyendo la justicia.
Toda esta barbarie pareció terminar en el año 1932 cuando el Papa San Pio X expidió la encíclica ¨ De Lacrimali statu indorum¨ del ¨Lamentable estado de los indios¨. Que arranca lágrimas pero ¿ya qué? Todas las prácticas posibles de muertes, torturas y maltratos fueron aplicados a los pobladores ancestrales de la Amazonía, sus mentes ya estaban enajenadas y las experiencias copiadas por los ejércitos del mundo para su práctica y experimentación.
Muchas de las familias que fueron caucheras terminaron siendo ganaderos, otros narcotraficantes, esperaran hoy en ser petroleros… y así la economía extractiva se extiende hacia el infinito.
COLONIA PENAL DEL ARARACUARA 1935
Para completar el panorama de convivencia en medio de las divisiones, las guerras, los odios, los miedos engendrados en las mentes de los pobladores ancestrales por la explotación quinera y cauchera se construye en sus cercanías una de las más temidas cárceles, era la Colonia Penal del Araracuara. Fue pensada desde 1935 por el presidente liberal Enrique Olaya Herrera a quien se le ocurrió crear tres cárceles de Máxima Seguridad, Malpelo, Gorgona y Araracuara.
Estando de presidente Alfonso López Pumarejo el 5 de Julio de 1937 se inauguró la prisión ubicada en el Departamento del Caquetá límites con el Amazonas y se Clausuró en 1971.
Tenía 11 campamentos El Central, Las Mercedes, Puerto Arturo, Bellavista, Patio Bonito (de jóvenes), El Yarí ( de alta peligrosidad), Angosturas, Perrera, Geórgicas (La Agricultura), Puerto Mosco, y la Playa. Al cerrarse el penal muchos de sus presos quedaron viviendo en la región entre las comunidades indígenas.
Pueblos que llevaban vivo el duelo de la muerte -según investigadores de la época de cerca de 40.000 indígenas- por muchas de las prácticas como el azote, el castigo, la tortura -como la del niño Iquiro de 4 años amarrado boca abajo durante dos meses-, el cepo y que a fuerza del uso las presentaban como legales, sufrirían los peores métodos para crear miedo, sumisión y obediencia. Métodos que quedan como herencia de una élite gobernante que jamás se arrepiente, ¿cuándo ha pedido voluntaria y conscientemente perdón?
Nunca, lo consideran símbolo de debilidad y cobardía convirtiéndolos precisamente en eso.
Bibliografía.
- Gómez A Ricardo ¨ La guarida de los asesinos¨ 1933
- Hardemburg W. E. El Putumayo el Paraíso del Diablo 1913.
- Olarte Camacho Vicente, ¨ Las Crueldades en el Putumayo y en el Caquetá¨. 1910
Tompson N. Cia, El libro Rojo del Putumayo. 1913.
[1] Morin, Edgar. Introducción al pensamiento complejo. Editorial Anthopos Pg. 23
[2] Paulo Freire. Pedagogía de la indignación pna 142.
[3] Sir Roger Casement. El libro Azul del Putumayopna 52
*Matemático de la Universidad de Antioquia, Mágister en Matemáticas Aplicadas de la Universidad EAFIT. Profesor de la Universidad de la Amazonía.
Fotografia de portada: Archivo Diócesis Mocoa Sibundoy.